- Granja y hogar
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Todos los que amamos a los animales sabemos que las gallinas son aves muy particulares. Su gracioso sonido, su singular forma de caminar y su agradable aspecto nos sacan siempre una sonrisa. Si te pedimos que pienses en una gallina, seguramente te la imaginarás blanca y con el pico rojo. Sin embargo, te sorprenderá saber que muchas gallinas no se parecen en nada a las más comunes. A continuación te mostraremos los tipos de gallinas más peculiares. ¡Seguro que no te dejarán indiferente!
Crianza de pollitos
Criar pollitos es una tarea algo complicada, ya que tenemos la responsabilidad de velar por la vida de unos pequeños animalitos que acaban de nacer. Debes saber que es importante llevar un excelente cuidado a lo largo de cada una de sus etapas vitales.
El cuidado de los pollitos comienza incluso antes de que nazcan, ya que es primordial incubar los huevos para que no sufran daños que afecten a su viabilidad. A su vez, debemos criar a los pollitos proporcionándoles un espacio seguro a donde, lógicamente, no accedan otros animales. La alimentación es sumamente importante en esta etapa, y debemos escoger piensos adaptados a su edad.
Tipos de gallinas más peculiares
¿Te preguntas qué razas de gallinas hay? Tras hacer un repaso por los registros, hemos elaborado una selección con las más increíbles. Muchas destacan por su impresionante aspecto; otras, por su tamaño; y otras son tan exóticas que directamente no se encuentran en nuestro país.
Ayam Cemani
Lo primero que nos llama la atención es su color, ya que no hay ninguna parte de su cuerpo que no sea completamente negra. Desde su pico hasta sus patas, esta gallina parece estar teñida de un tono oscuro brillante que impresiona solo con verlo. Un dato interesante: es también la variedad más cara del planeta, y puede llegar a costar unos 3.000 €.
Mientras que en Occidente tenemos la superstición de que los gatos negros atraen la mala suerte, en Indonesia —país de origen de las Ayam Cemani— adoran estas gallinas negras por ser un símbolo de fortuna. De igual forma, su interior tampoco deja de ser sorprendente: algunos de sus órganos, como el corazón, también son también de un tono totalmente negro.
Barbu d´Uccle
Esta gallina, originaria de Bélgica y también denominada Millies, se caracteriza por su tamaño ligeramente inferior al normal. Además, sus patas llenas de plumas voluminosas captan toda la atención rápidamente. Tampoco podemos obviar su «barba», que se encuentra debajo del pico y se asemeja al vello humano por sus tonos medianamente oscuros.
Es una de las razas que más disfrutan del contacto humano, ya que tiende a ser amigable y cariñosa. Por este motivo, estas gallinas son ideales para que los niños comiencen el contacto con el mundo animal. Su origen es algo incierto, aunque se piensa que provienen de un cruce con la Barbu d´Anvers.
Marans
Estas gallinas provenientes de Francia toman su nombre de la ciudad de la que proceden. En el momento en el que ponen los huevos, nos damos cuenta de lo que las hace tan especiales: sus huevos son completamente marrones. Por si fuera poco, estos pueden adquirir tonos rojizos muy llamativos en ocasiones.
Esta raza se divide, a su vez, en otras que presentan colores que van del dorado hasta el cobre negro. También se han visto ejemplares con tonos tan poco comunes como el azul. Esto, unido al naranja de sus ojos y al rosa que puede estar presente en sus patas, convierte a las Marans en una de las variedades más coloridas.
Gigante de Jersey
Hay dos aspectos que te llamarán la atención: su tamaño —claramente, no se iban a llamar gigantes por azar— y su carácter. Respecto a lo primero, pueden llegar a pesar hasta 7 kilos, sobre todo las hembras. Además, se encuentran entre las gallinas más grandes de todo el planeta.
En lo relativo a su carácter, destacan por ser muy amigables. En realidad las gallinas no son seres ariscos, pero no es común que tengan un comportamiento tan tierno como el de la Gigante de Jersey. Mientras que los machos suelen adoptar un rol de protector, las hembras son muy dóciles con las personas.
Sumatra
La recóndita isla de Sumatra, en Indonesia, es el origen de esta raza tan difícil de encontrar. ¿Lo que más llama la atención? Su plumaje liso y largo, especialmente en la parte trasera. Estas aves presentan un color negro brillante, aunque también pueden ser blancas o azules.
Debes saber que este tipo de gallinas suelen ponerse cluecas con facilidad. Si bien todos sabemos que las gallinas no destacan precisamente por sus habilidades de vuelo, estas son unas de las que más tiempo pueden pasar en el aire.
Svarthöna
Su impronunciable nombre, aunque llama la atención, no es lo más impresionante de esta raza, sino el color negro intenso que recorre todo su cuerpo. Si estas gallinas te recordaron a las Ayam Cemani estás en lo cierto, pues son muy parecidas. Además son muy valoradas en la ganadería avícola por la fertilidad de sus huevos.
Son algo más pequeñas que una gallina promedio, y ponen huevos de color blanco. De acuerdo con diversos estudios su origen se encontraría entre Suecia y Noruega, debido a una mutación que tuvo lugar hace más de cuatro siglos. ¿Sabes cuántas aves de esta raza se calcula que existen? Solamente 500.
Gallina Sultán
Acariciar a una gallina Sultán es maravilloso. Debido a su voluminoso plumaje, estas gallinas tienen un tacto esponjoso muy singular. La primera sensación que puedes tener al contemplarlas es que tienen algún tipo de peinado extravagante, pero la realidad es que son así. Por si fuera poco, en su parte trasera cuentan con un conjunto de plumas de gran tamaño.
En cuanto a su temperamento, domesticarlas no es para nada complicado, e incluso pueden permanecer en espacios cerrados sin ningún problema. Curiosamente sus crías tienen un desarrollo muy lento, lo que ha llevado a estas gallinas a estar en peligro crítico de extinción. Si bien las más comunes son de color blanco, también las hay en azul y negro.
Recomendaciones de crianza
A estas alturas, probablemente te imaginarás que razas tan exóticas como las que te hemos dado a conocer aquí requieren unos cuidados especiales, ya sea por su tamaño, por su pelaje u otras particularidades. De igual manera, hay un aspecto que las condiciona: todas (o casi todas) son muy difíciles de encontrar y suelen venderse por cifras astronómicas.
Las gallinas Sultán, por ejemplo, no presentan grandes dificultades a la hora de criarse. No obstante, debes saber que la época invernal les suele afectar bastante, puesto que se desarrollan mejor en ambientes cálidos. Además sus pollos crecen de forma muy lenta, así que la paciencia será tu mejor aliada.
La gallina Sumatra puede resultar más complicada de criar. ¿El motivo? Principalmente, que esta gallina no cuida de sus huevos, por lo que te recomendamos utilizar una incubadora eléctrica. Por otro lado sus crías suelen nacer con grandes carencias de nutrientes, así que mejor proporciónales un suplemento.
Las gallinas Ayam Cemani tampoco son grandes cuidadoras. Al igual que en el caso anterior, te aconsejamos emplear ponederos para gallinas. Sin embargo, el motivo es bien diferente: sus puestas anuales suelen ser bastante pobres, así que lo mejor es asegurarse de que al menos serán fértiles.
Por el lado contrario, los pollos Svarthöna son bastante fáciles de criar. Las madres suelen ser buenas cuidadoras, y ponen una cantidad muy decente de huevos al año (en torno a los 250). Además resisten bien el frío, pero no está de más que vigiles la temperatura si vives en zonas de montaña.
Respecto a los pollos Marans, estos requieren un cuidado algo más complejo, pero en principio no deberían resultar difíciles de criar. Tres consejos: intenta que reciban 14 horas de luz natural al día, resérvales un espacio para que se den baños de polvo y procura que tengan siempre bebederos para gallinas con agua fresca a su alcance, ya que suelen necesitar refrescarse a menudo.
El gigante de Jersey, obviamente, necesitará una alimentación más generosa para su crianza. No debemos olvidar que se trata de una variedad que, además de tener un desarrollo lento (a partir de los seis meses), necesita alcanzar un tamaño importante. Las hembras suelen ser excelentes cuidadoras, así que no habría problema en este sentido.
Por último, criar a pollos Barbu d´Uccle requiere de espacios cerrados, ya que es común que se tropiecen o se enreden con sus patas emplumadas. Durante la época de apareamiento mantén a los machos lejos de las crías, puesto que suelen volverse agresivos. Por lo demás, no hacen falta cuidados muy específicos.
¿Sabes ya qué razas de estas aves hay? Ahora hazte con ponederos y bebederos para tus gallinas
Estos son algunos de los tipos de gallinas más peculiares que puedes encontrar. Algunas gallinas nos han sorprendido por su gran belleza; otras, por su pintoresco comportamiento; y otras, por ser verdaderamente difíciles de encontrar, pero todas son especiales. Recuerda la importancia de cuidarlas adecuadamente para que en el futuro realicen puestas muy abundantes y fértiles. ¡Lánzate a la cría de pollitos exóticos!